sábado, 4 de octubre de 2014

Peligrosa recta final

Esta es una semana definitiva y crucial, con resultados previstos, pero sin futuro. O mejor dicho con futuro incierto para Chota. Un “todo puede pasar” tímido, riesgoso, frustrante o quizá esperanzador. No hay nada que augure aún (ni las encuestas amañadas) el victorioso de las elecciones municipales del domingo.
Por supuesto que para algunos es una victoria política. Pero, sobre todo, es una victoria económica y estratégica, pues las arcas municipales son un verdadero y codiciado botín, al que los advenedizos llegan con la única intención de desvalijarlo y hacer de la gestión municipal un negocio turbio y pestífero.
Si bien las autoridades elegidas pueden catapultarse electoralmente. No puede decirse lo mismo de su legitimidad, porque no son producto de una elección limpia, transparente, realmente democrática, sino, más bien, el resultado de una anomia social, del descrédito de la política, del abuso del poder, de la corrupción consentida y el beneplácito de los ignorantes.
 De modo que ingresamos a la recta final de las elecciones con pocas esperanzas y muchas dudas. Los que ayer predicaban, siguiendo a Mariátegui, la política como pedagogía, no han hecho nada más que ensuciar con heces el legado del gran pensador peruano. ¿Quién puede creer ahora en esos revolucionarios de papel (higiénico)?

Y una pregunta final: ¿por qué los chotanos tan afamados de rebeldes y libertarios, reconocidos en el ámbito nacional como valientes y corajudos luchadores contra la injusticia y la corrupción permitimos está afrenta contra nuestro propio honor y dignidad?
Semanario Amor y Llaga N° 543

No hay comentarios:

Publicar un comentario