lunes, 30 de mayo de 2011

Aniversario sagradino

No se sabe en mérito a qué disposición, norma o acuerdo, el colegio (I.E.) Sagrado Corazón de Jesús celebra el 1° de junio su día central de aniversario, si la ley (N° 14112) que crea el entonces denominado “Colegio Nacional de Educación Secundaria para Mujeres” fue dada por el congreso el 28 de noviembre de 1961 y promulgada por el presidente Manuel Prado el 15 de junio de 1962.

Lo cierto es que luego de diversas gestiones de padres de familia, y bajo argumentos moralistas, se desdobla el Colegio Nacional San Juan, para formar el nuevo colegio exclusivo para mujeres, que inicialmente tomó el nombre “La Inmaculada” y, a partir de 1963, cambiado por el de “Sagrado Corazón de Jesús”, luego que el Ministerio de Educación dispusiera que sea regentado por la congregación religiosa del mismo nombre.

En sus años iniciales ejercieron la docencia en la nueva institución educativa los mismos profesores del Colegio San Juan, de modo que el propio contexto en que nace y empieza su camino en la historia educativa y cultural, está relacionada con el Alma Máter de Chota.

Sin embargo, es innegable que el colegio Sagrado Corazón de Jesús, ha ido forjando su propia identidad y se coloca ahora en un sitial muy importante, contribuyendo a ello la estabilidad administrativa en su conducción y gestión, hecho que le ha posibilitado alcanzar significativos logros, tanto en su infraestructura como en la misión educativa.

(Como colofón de este saludo al colegio Sagrado Corazón, pedimos que no se repitan en su página web los despropósitos que se escribieron en su revista “Bodas de Plata” para descalificar, sin un preciso y riguroso análisis, a los directores del colegio San Juan, lo que demuestra no superados lastres de infamia intelectual).

Amor y Llaga N° 415


lunes, 23 de mayo de 2011

Fudip, nuevo periodo


No hay duda que las reivindicaciones populares se conquistan tras un proceso de unidad, organización y lucha permanente. La unidad es fundamental. Todas las personas, instituciones y gremios comprometidos en un reclamo, deponiendo comprensibles diferencias de opción política o ideológica, deben concurrir a gestar, desarrollar, fortalecer y consolidar la necesaria unidad para el logro de una aspiración social.

Pero la unidad no es suficiente sin una organización que estructure y configure orgánicamente a las multitudes. Esa organización supone un cuadro de dirigentes capaces de conducir y dar fisonomía y perspectiva a los reclamos. Supone, también, reglas democráticas para la elección de sus dirigentes, quienes son los portaestandartes de las reclamaciones. Sin una organización sólida, los reclamos más justos pierden su razón de ser o son postergados.

A la unidad y organización hay que añadir la lucha, es decir el combate firme por una causa justa. Un reclamo empieza por una necesidad social que adolece a una comunidad, a un sector social o un pueblo. Pasa por las solicitudes y memoriales ante las entidades estatales. Se formaliza en plataformas de lucha y se convierte en un torrente cuando aquella es vital para el desarrollo humano y social de nuestros pueblos.

El Fudip cuenta ahora con nueva directiva, ¿qué esperamos de sus integrantes? Que asuman la responsabilidad para los que han sido elegidos y se coloquen al frente de las reclamaciones, exigencias y aspiraciones sociales de Chota y no a la cola de éstas, como ha ocurrido en la última década. Los nuevos dirigentes tienen que ser capaces de construir la unidad, reestructurar la organización y conducir la lucha del pueblo chotano.

Amor y Llaga N° 414

sábado, 14 de mayo de 2011

San Juan en la historia


Este día (15 de mayo) será memorable. No sólo para quienes pasamos por las aulas de nuestro viejo y querido colegio San Juan, sino también para el pueblo chotano en su conjunto. Pocas son las instituciones que tienen tan ganada trascendencia histórica. Es por ello, que la celebración del sesquicentenario de su fundación convoca sentimientos, pasiones, reflexiones, inteligencias y esfuerzos, pese a cierta malhadada indiferencia de sectores aislados, díscolos y aviesos de su profesorado.

La historia del colegio San Juan está tan consustanciada con la de Chota que comúnmente se dice “San Juan es Chota y Chota es San Juan”. Efectivamente, la misma creación del colegio, a iniciativa del ilustre chotano y prestigioso político, don José Manuel Osores Cuervo, es ya un acontecimiento que marcó la historia de Chota.

Desde entonces “decenas de generaciones juveniles que acrisolaron su carácter en las viejas aulas del San Juan” –como señala Gilberto Vigil Cadenillasforjaron, a lo largo de siglo y medio, los grandes ideales de la patria, la libertad y la soberanía, y se inmolaron con valor defendiendo la justicia social, la dignidad humana y el honor nacional.

Esta morada del saber, esta morada de la ciencia, la cultura y el arte, esta morada de la libertad y la dignidad, es algo más que sanjuanistas, sus aulas y sus profesores. Es la memoria histórica de Chota, es la síntesis de 150 años de vida; pero, a su vez, es el sueño de un futuro mejor, el futuro de luz y verdad, que la educación debe fraguar en cada estudiante y hacer de él un ciudadano libre, justo y digno.

Amor y LLaga N° 413

domingo, 8 de mayo de 2011

El Legionario


Coincidiendo con las actividades por el sesquicentenario del glorioso Colegio Nacional San Juan, la Legión de la Orden Coronel Manuel José Becerra Silva de Chiclayo, ha publicado su revista oficial denominada El Legionario, a cargo del siempre entusiasta y dinámico profesor Humberto Cabeza Acuña.

El Legionario es realmente la revista que esperábamos quienes seguimos de cerca el accionar de las instituciones, como la anotada legión patriótica y cívica, fundada para honrar, valorar y perennizar la vida y obra de aquel ilustre chotano, sanjuanista comprometido, maestro íntegro, alcalde honorable, ciudadano ejemplar, soldado valiente y peruano digno, que no cejó en las horas cruciales de la patria para enrolarse en su defensa.

El Legionario es una revista muy bien diseñada e impresa con buena calidad y presentación que resalta la figura de don Manuel José Becerra Silva y constituye un documento de primer orden para dar a conocer las diferentes facetas de aquel paradigma de nuestra identidad.

Además de la reseña de las distintas actividades de Orden, destaca el ensayo Coronel Manuel José Becerra Silva: El guerrero sin reposo, de Segundo L. Rojas Gasco, un ex oficial del Ejército Peruano, historiador y estudioso de la vida y obra de Becerra Silva.

Hay mucho que significar de esta revista. Sólo esperamos que sea difundida y valorada como corresponde una obra intelectual de esta naturaleza.

Amor y Llaga N° 412