lunes, 29 de abril de 2013

Essalud, el noveno monstruo


Jamás, señor ministro de salud,
fue la salud más mortal
César Vallejo


Los versos de nuestro poeta universal, César Vallejo, nunca fueron tan actuales como hoy, cuando los sucesivos gobiernos, prestos siempre a aplicar las reformas y emplastos neoliberales para salvar los intereses de los ricos, estrangulan el presupuesto de sectores claves para el bienestar y desarrollo humano como la salud y la educación, aplicando obsecuentemente las recetas del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial y de la Organización Mundial del Comercio, convertidas en verdaderas organizaciones criminales.
   Una de esas repudiables y nefastas políticas que los gobiernos aplican como condición para recibir préstamos, es que el estado reduzca ostensiblemente sus gastos en salud y que se privatice la prestación de este servicio. En otras palabras, el empeoramiento cada vez mayor de las condiciones de vida de la población y la cruel e impune autorización para que la salud, como cualquier otra mercancía, se someta a las leyes del mercado; es decir, la muerte segura de los sectores sociales más vulnerables: los pobres.  
    En nuestro ámbito, esta situación se ha hecho patente, entre otros aspectos, con el estado calamitoso, de abandono y deterioro creciente del Centro Médico de Essalud de tal modo que ha originado un descontento cada vez mayor de la población asegurada que suma más de 18 mil personas, debido a que no hay una atención adecuada ni menos cuenta con  infraestructura, ni equipos, ni personal médico y paramédico mínimo y especializado (hace pocos años hubo un jolgorio y hasta colocaron la primera piedra para la construcción del policlínico).
   Este es otro de los graves problemas que aquejan a la población. La mortalidad, la desnutrición y la anemia crecen, pese a ello el presupuesto del sector salud no alcanza el 5% del PBI, muy por debajo del promedio del gasto en salud  en Latinoamérica (7.3%). Por ello, urge que las organizaciones sociales, los comités de asegurados, los sindicatos y frentes de defensa unan sus fuerzas para luchar contra ese monstruo, uno de los nueve monstruos que devoran a la humanidad.  

lunes, 15 de abril de 2013

El libro Bodas de Oro de la Prelatura


Con motivo de los 50 años de creación de la Prelatura de Chota (7 de abril 1963-2013) se ha publicado un interesantísimo libro, editado prolijamente, para conmemorar tal acontecimiento, en el que se resume la labor pastoral desarrollada por obispos y sacerdotes en el extenso ámbito de las provincias de Chota y Cutervo, recorriendo caminos escabrosos, para llevar el mensaje cristiano a los más apartados caseríos y poblados.
   Como se recuerda en sus páginas, el 7 de abril de 1963, el Papa Juan XXIII creó la Prelatura de Chota y Cutervo, separándola de la Prelatura de Chiclayo, y desde entonces la gran tarea de fortalecer la espiritualidad y remozar el sentimiento religioso de las personas se acrecentó a la par de una administración muy cuidadosa emprendida por los recordados obispos Florentino Armas Lerena, José Arana Berruete, Emiliano Cisneros, Carmelo Martínez Lázaro y actualmente Fortunato Pablo Urcey.
   La publicación de este libro no sólo es una relación de la vida religiosa en estos cincuenta años, sino es el testimonio de una parte muy valiosa e indesligable de la historia de Chota, por ello sus instituciones creadas: parroquias en el ámbito de las dos provincias, congregaciones, seminarios, cooperativa, ONGs (Caritas y Haren Alde), emisora Santa Mónica, amén de comunidades religiosas, nos dicen mucho de su obra destinada a estar presente también en las preocupaciones cotidianas de los hombres del campo y la ciudad.
  Debemos expresar nuestro gozo por este libro, su pulcra presentación y las ilustraciones inspiradas del extinto fray Esteban Peña Sáinz, poeta y pintor, y las fotografías y diseño gráfico a cargo del sacerdote Rafael Nieto Lerena. Es seguro que este libro enriquece la bibliografía de Chota.

domingo, 7 de abril de 2013

¿En qué se diferencian de la derecha?


El cuestionamiento público, o mejor dicho el desafío al presidente regional por parte de un miembro de su propio círculo de asesores políticos, sólo por el hecho de no haber sido designado gerente subregional, dice mucho del nivel de descomposición de la política y de la pésima calidad del equipo que gobierna la región.
Hace mucho que se advertía la proximidad de un enfrentamiento así, inútil, torpe y risible, pero a su vez indignante. Gestado, por supuesto, por ese mal recurrente en nuestra sociedad, practicado y replicado por todos los que han llegado a un cargo ya sea por elección popular o designación, que creen que la administración pública es para llenarse los bolsillos.
Pero, aquí se suma otro factor, tal vez el que haya desencadenado el pleito: el afán electorero del presidente regional, más empeñado en promover su candidatura que en solucionar los problemas de fondo de Cajamarca. Lo cual ha despertado, por igual, las apetencias de los señoríos políticos locales.
Abandono de las promesas y compromisos, manipulación de las necesidades del pueblo, uso indebido de los recursos públicos, clientelismo a toda máquina, peleas intestinas por copar los cargos, incapacidad para solucionar los problemas, las necesidades y exigencias del pueblo, en fin… ¿en qué se diferencian de la derecha?
Un movimiento o un partido que no se construye sobre bases políticas, ideológicas y sociales firmes y principistas, más aún si se reclama de izquierda, termina corroído por la más escabrosa pugna por el control de los puestos y cargos, y la renuncia a su ideario, para convertirse en una rapaz gavilla electorera o, mejor dicho, para mostrar sus verdaderas garras.

Amor y Llaga N°