Es conocido que Alexander von Humboldt y Antonio Raimondi en sus recorridos por el país visitaron Chota, el primero en 1802 y el segundo en 1859. Cada cual nos ha dejado las impresiones de su viaje en sendos libros. Chota era entonces una pequeña villa que formaba parte de la intendencia de Trujillo; luego, al surgir la vida independiente, del departamento de La Libertad y, al crearse el departamento de Cajamarca en 1855, pasó a integrar a éste como una de sus cuatro provincias (Cajamarca, Cajabamba, Chota y Jaén).
Pero Humboldt y Raimondi no fueron los únicos viajeros y científicos europeos que visitaron Chota en ese periodo de formación de la república. Fueron muchos hombres de aventura, caminantes y pioneros que exploraron nuestras tierras y se imbuyeron de nuestras costumbres y cultura. Uno de ellos, fue el viajero y comerciante alemán Heinrich Witt, quien visitó Chota en los meses de mayo y junio de 1842.
Constancia de su visita y de sus impresiones, Witt los ha dejado en un libro de viajes publicado en inglés. En él, Witt hace referencia de la celebración de la fiesta de San Juan, de la cual quedó gratamente conmovido y describió los pormenores de la tradicional danza de los maichilejos. Dice Witt que esta danza tiene similitud con otra que ejecutaban entonces en Celendín, localidad que también visitó el viajero alemán.
De la danza los maichilejos no se tiene un estudio exhaustivo. Su semejanza con otras que se practican en la región andina del país es evidente, aun muy similar con la contradanza de la serranía de La Libertad. En Chota, la danza de los maichilejos es ocasional, pues de ejecuta el 23 de junio, cuando se traslada al santo patrón San Juan, que en aquellos tiempos, debido al racismo y a la discriminación imperante, había para los blancos, para los quinteros y para los indios.
La traducción y difusión del libro de Heinrich Witt resulta, así, imprescindible para conocer nuestra tradición e identidad.
Amor y Llaga N° 417