Luego de dos
semanas de pausa debido al decaimiento de la salud de nuestro amigo José López
Coronado, editor de este semanario, retornamos siempre firmes a nuestra dura
batalla contra el silencio, el oprobio, la indiferencia, la corrupción
institucionalizada en la administración pública y toda variedad de oportunismo
político que tanto daño hacen a nuestros pueblos.
El destape
de la malversación, despilfarro, defraudación, desfalco y mal uso de los fondos
municipales, por llamarlo eufemísticamente a lo que en lenguaje popular se
conoce como robo, por varios millones de soles por parte de funcionarios de la
gestión del prófugo alcalde Julón, coludidos con empresarios de dudosa razón
social, no deja duda de la inmundicia y hediondez en que se había convertido la
Municipalidad de Chota en manos de esa mafia.
Pese a ello,
no faltan chotanos vergonzantes, ¡qué lástima!, envilecidos por las migajas que
les tiraba el amo, quienes han salido a defender lo insostenible, incluso al
grado de plantear la vacancia de las autoridades que ahora están limpiando la
gestión municipal. Y lo que también llama la atención es la mudez de los
candidatos respecto a un tema tan decisivo y que debe marcar la diferencia: corrupción versus honestidad en el uso
de los recursos municipales. Al parecer hay muchos que prefieren continuar en
la danza.
Seguiremos
en nuestra batalla por una Chota digna, próspera, segura, limpia, habitable y
desarrollada. Batalla que se ha consustanciado con los 33 años de fundación del
grupo cultural Wayrak (16 abril 1981) y los 16 de este semanario Amor
y Llaga (06 julio 1997), y la vida entera para consagrarla a la
libertad, la justicia y la dignidad. ¡Siempre firmes!
Amor y Llaga N° 526